Francesco Paolo Bonelli

Joven y pequeña empresa premiada en el corazón de Basilicata, en la provincia de Matera exactamente en Grassano, la miel que produzco se llama Crassanum en homenaje al territorio y a la ciudad de la que estoy profundamente enamorado. Tengo tres pequeños colmenares compuestos por unas pocas docenas de colmenas. Dos colmenares están situados dentro de dos olivares centenarios que conduzco según los dictados de la agricultura biológica, y uno está cerca de un bosque de matorral mediterráneo que posee mi familia desde hace casi 100 años, y donde viven tortugas en libertad. Este último colmenar está situado no lejos de la reserva natural del lago de San Giuliano y del oasis del WWF. Para mi gran suerte y la de mis pequeños e incansables trabajadores, está rodeado de bosques y ríos y de numerosos cultivos ecológicos y extensivos. En septiembre de 2020, para mi gran satisfacción, como testimonio de mi compromiso y pasión por estas maravillosas criaturas, la empresa fue galardonada con dos premios en el concurso tres gotas de oro grandes mieles de Italia, una gota de oro para la miel millefiori y la más prestigiosa de tres gotas de oro para la miel de trébol, en 2021 ganador de dos premios dos gotas de oro para la miel millefiori y para la miel millefiori de bosque mediterráneo. También en 2022 nos concedieron dos gotas de oro para la miel de flores silvestres de primavera y una gota de oro para la miel de flores silvestres de bosque y verano, y en 2023 nada menos que cuatro premios, para las mieles de flores silvestres, de trébol y de cilantro, que dan fe del compromiso y la gran biodiversidad de nuestra tierra.